domingo, 31 de octubre de 2010

Te doy la razón

Las miradas perdidas, la falta de atención, las frases sin sentido, la desviación del pensamiento; provocan en la persona un vacío, la (rara y a veces ligera) sensación de ineptitud de uno mismo. Otras veces crea un agujero que sólo es atravesado por el deseo de "levantarse" (no sólo físicamente) y por fin hacer un esfuerzo moverse, ya sea física o mentalmente. Todo ser humano necesita mover y levantarse continuamente para evitar la sensación de tristeza y angustia, aunque el ser humano en sí está destinado a no ser feliz. Irónicamente, el uso de la razón desecha esa posibilidad.

La literatura, un viaje sin rumbo fijo

"Ahí encontré una exhortación que Duhamel dirigía a los jóvenes que aspiraban a formar parte del mundo literario:
"Entonces, joven, vive la vida ante todo. Bebe abundante leche de la ubre de la vida para nutrir tus futuras creaciones. ¿Dices que quieres escribir buenas novelas? Hazme caso entonces y embárcate en algún puerto. Recorre el mundo ganándote el sustento con modestas ocupaciones, y soporta la pobreza. No te apresures a tomar la pluma. Sométete al dolor y al sufrimiento. Aprende con las miles de personas que encuentres a tu paso. Y cuando te doy estos consejos, quiero decir que jamás trates de esquivar la angustia que te ocasionen los demás o las adversidades que tengas que experimentar para hacerlos felices. (...) ¿Quieres escribir buenas novelas? ¡Óyeme bien, entonces! Antes que nada, trata de olvidar ese deseo. Emprende un viaje sin pensar en un rumbo fijo. Agudiza la vista, el oído, el olfato y el apetito. Espera con el corazón abierto. Tal como hizo..."."

domingo, 24 de octubre de 2010

Vuelta al avance

Explosión. Te pitan los oídos. El humo te nubla la vista; te pican los ojos. Sientes el sabor del polvo, del suelo. Cuando el chaos estalla, tiene que pasar cierto tiempo para que se restablezcan los sentidos, para que, en el momento en que el orden vuelva a su sitio, a las cabeza de cada persona, vuelva más serio y con sentido consentido; la vuelta que ya no es vuelta porque el retorno no se produce al punto de partida. Es todo un ir "to and fro", sólo que distinto cada vez...